Trabajar más allá de tu jubilación puede ser algo positivo, es terapia ocupacional, ¡por favor! No pienses en retirarte para ya no hacer nada. Solo asegúrate que, durante tu vida productiva, acumular la cantidad dinero que te permita trabajar en lo que más te gusta hacer sin la presión de generar para el día a día.
Como bien sabes el pago de jubilación, hoy por hoy, no es directamente proporcional al sueldo recibido a lo largo del tiempo, por lo que te recomiendo buscar otras opciones. ¡por favor! Toma esto como una responsabilidad personal, no la puedes endilgar a nadie más.
Toma en cuenta que contar con una AFORE no garantiza vivir plenamente la jubilación, con las últimas reformas no todas las personas salen beneficiadas además, solo podrás usar tus aportaciones hasta la edad de retiro, así que, si quieres independizarte antes, lo conveniente es que ahorres e inviertas en otro tipo de instrumentos.
Mi recomendación es que te prepares, cuanto más joven mejor, para tu etapa de retiro: ¿Qué cómo?
- Cuida tu salud física, emocional y espiritual.
- Hazte de un trabajo edificante y apasionante
- Acumula un patrimonio suficiente que te dé estabilidad financiera, lo suficiente para que te garantice un gasto promedio de 5 años. Lo común es que tus gastos para vivir disminuyan un 30% conforme avanzas en edad.
- Tres elementos para apreciar: salud, dinero y tiempo para poder viajar.
- Revisa tu AFORE periódicamente, ¡es increíble la cantidad dudas que surgen cuando revisas tu estado de cuenta y lo impactante que resulta notar que el saldo de tu cuenta crece a pasos tortuga!
- Prepárate con pólizas de seguro, son necesarias la de: gastos médicos mayores, pólizas de vida y por supuesto ¡jamás manejes un automóvil que no se encuentre asegurado!
Cómo todo es cambio constante, es necesario que lleves a cabo una revisión periódica de tu situación financiera, tu estado de salud personal, emocional y espiritual: cada mes, cada seis años, cada año y cada cinco años. ¡el chiste es estar en la jugada con tu dinero!