Se sincero contigo mismo ¿cuántas veces has puesto como pretexto que no comes saludable porque es muy costoso? Todos tenemos la creencia que comer sano solo implica comer alimentos que suelen ser más caros que el resto de los productos que están en nuestra dieta habitual ¿creerías si te dijera que una dieta saludable le cuesta lo mismo a tu bolsillo que consumir alimentos procesados?
La realidad es que, en México, 4 de cada 10 niñas, niños y adolescentes padecen de obesidad y sobrepeso, además que la dieta diaria de 5 de cada 10 de ellos suele contener botanas, dulces y postres, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2021.
Por otro lado, según una publicación de la revista UNAM Global, el 50% de la población mexicana consume dietas no saludables, con alimentos procesados y ultraprocesados, altos en azúcares y grasas, ello debido a una serie de factores como el nivel socioeconómico, la condición étnica, la educación, el estado de salud, entre otros; además de una mala creencia sobre que una dieta con valor nutricional es mucho más costosa. Estos investigadores se propusieron desmentir el mito sobre el costo de la comida sana, por lo que realizaron un estudio donde analizaron los contenidos de las dietas de lo niños, niñas y adolescentes, además de comparar los precios de los alimentos que consumen, visitando supermercados, mercados y tiendas de conveniencia (la base son precios del 2019):
• Un litro de agua costaba en promedio 12 pesos, en contraste con el costo de bebidas azucaradas (jugos y refrescos), con un costo de 13 pesos por litro.
• Un kilo de plátano se podía adquirir en 20 pesos, en comparación de algunos pastelillos que costaban 55 pesos aproximadamente.
• Un kilo de carne de cerdo se adquiría en 80 pesos, mientras que el kilo de frituras rondaba los 115 pesos.
Ni que decir sobre los costos médicos por una mala dieta, también publicaron datos sobre el costo de la atención medica por enfermedades que derivan de la obesidad ¡te sorprenderá la cantidad de dinero! Entonces si quieres no llegar este punto y gastar menos en tus alimentos y estar mejor, te dejó estos consejos:
• Planifica tus comidas: con ayuda de un presupuesto, organiza tus comidas definiendo cuánto gastarás en alimentos al mes o por semana, si te es más fácil.
• Al ir al súper apégate a tu lista de compras: el siguiente paso es realizar un listado de los alimentos que necesitarás, y el truco es no realizar compras involuntarias o que no estén en tu lista, además recorre el súper solo pasando por las tres paredes de este (costados y parte trasera) ya que son en estos pasillos donde se encuentran los productos frescos y proteínas, y también evita ir con hambre.
• Aprovecha ofertas o compra en grandes cantidades: busca promociones en los alimentos básicos o que consumes con frecuencia y compra en grandes cantidades (siempre que no caduquen pronto), como arroz, lentejas, frijoles, avena, entre otros.
• Dale la oportunidad a las marcas genéricas: no todas son malas o de baja calidad, puedes verificar y comparar el valor nutricional de los productos en las etiquetas.
• Prepara tus comidas en tandas: para ahorrarte tiempo y dinero, lo recomendable es que al momento de cocinar lo hagas en tandas o de forma abundante, así puedes dejar todo en recipientes y lo demás congelarlo para después.