¿Te gustaría viajar, pero no tienes dinero?

A todos nos seduce la idea de conocer lugares, culturas y pasar por la travesía de un viaje, sin embargo, muy pocas personas tienen la posibilidad de cumplir con los sueños de ser un viajero frecuente. Pero ¿Qué pasaría si te dijera que puedes hacerlo utilizando una tarjeta de crédito?

Pero no es cualquier tarjeta, hoy por hoy, existen productos financieros pensados en los viajeros frecuentes, los cuales pueden ser muy beneficiosos si se utilizan de manera responsable. Por el contrario, puede ser un peligro para nuestras finanzas si no las usas con prudencia y elige la que mejor se adapte a ti y analices previamente los detalles.

Es importante que además de concentrarte en la que más beneficios te ofrezca, consideres tu estilo de vida y necesidades. Además, es primordial considerar información sobre el tipo de comisiones que maneja, el costo por anualidad, Costo Anual Total (CAT), los seguros y otros factores.

Cada que nos disponemos a salir de viaje, surge la pregunta: ¿efectivo o tarjeta? Siempre es bueno cargar efectivo, pero llevar tu plástico aporta una gran libertad al momento de viajar como: practicidad, facilita tus transacciones y, en muchas ocasiones, es mucho más segura que llevar el dinero en efectivo.

Las tarjetas de crédito diseñadas para viajes están pensadas especialmente para viajeros recurrentes o personas que buscan experiencias exclusivas durante sus viajes. Lo que la diferencia de las tarjetas tradicionales son los beneficios que ofrecen durante los viajes;  algunos de los más comunes son: Accesos a salas VIP de aeropuertos: Puedes ingresar a espacios con comodidades exclusivas como Wi-Fi, comida y bebidas gratis, asientos más cómodos e incluso camas para descansar. Aceptación en todo el mundo. Viajar gratis: Al acumular puntos con las compras.

Pero, antes de solicitar unatarjeta de crédito para tus viajes, necesitas saber cuál es la que mejor se adapta a tus necesidades e intereses, así podrás aprovecharla al máximo. Actualmente en el mercado existe una extensa variedad de ellas así que, pon mucha atención a los siguiente:

• Antes de solicitarla, debes asegurarte de contar con un buen historial crediticio.

• No contrates la primera que te ofrezcan, ya que puede ser que no se ajuste a tu capacidad de pago. Compara en diferentes instituciones el mismo producto y compara sus beneficios.

• Ten en cuenta que una TDC, es un préstamo que te otorga el Banco y si no la pagas en las fechas que se te indica, tu deuda se puede convertir en algo impagable.

• Toma en cuenta el cobro de la anualidad y saber si realmente se acopla a tus gastos.

• Antes de firmar, lee detenidamente el contrato y no te quedes con ninguna duda.

Cuando planeas un viaje, sobre todo al extranjero, no puedes dejar de lado la gestión de tu dinero, sin duda, una tarjeta de crédito es una excelente manera para controlar tus finanzas ¿café?

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