Tu dinero debe tener un pie en tu presente y otro en tu futuro
Judith Chávez
La mayoría de nosotros planeamos, en el mejor de los casos, nuestros gastos para cubrir los requerimientos básicos de: alimentación, transporte, vestimenta, lujos y diversión. Sin embargo, algunos objetivos personales a futuro, como compras importantes (una casa, un coche, etc.), nuestra jubilación y nuestra seguridad que requerirán dinero, para lo cual debemos planificar desde ahora.
¿Qué es la planificación financiera personal?
Vamos a ponernos académicos: “Laplanificación financiera es el conjunto de decisiones realizadas a lo largo del ciclo vital de nuestra vida con el objetivo de dar respuesta a las necesidades financieras presentes y futuras. La planificación financiera permite controlar todos aquellos hechos relevantes y / o adversidades que se planteen y que puedan perjudicar nuestro patrimonio.”
Si dudarlo, planificar tus finanzas tendrá un impacto en: tu calidad de vida, reducirá tus deudas y te dará el impulso para optimizar tus ingresos y gastos, además ejercitarás el bonito hábito del ahorro a largo plazo y también, a ir proyectando el nivel de vida que tendrás en tu etapa de retiro.
Pero ¿Qué tenemos que planificar a nivel personal y familiar?
Tal vez las respuestas no surjan tan claramente como esperas y tu mente te dará muchos motivos por los cuales no puedes o no necesitas prepararte para el futuro. Sin embargo, enfrentarte a cuestionamientos incomodos y puntuales sobre tus necesidades financieras presentes, te puede ayudar a dimensionar las necesidades futuras:
- ¿Necesito comprarme una casa, un coche o simplemente un televisor?
- ¿Dispongo de un fondo de emergencia para hacer frente a los imprevistos que me puedan surgir mañana?
- ¿Tengo dinero ahorrado para la educación de mis hijos?
- ¿Puedo jubilarme tranquilamente manteniendo mi actual nivel de vida?
La respuesta a muchas de las preguntas anteriores se traduce en la definición de una serie de objetivos, y estos nos llevarán inmediatamente a plantear nuevas preguntas, aunque su resolución es menos intuitiva que las primeras:
- ¿Qué cantidad de dinero hay que invertir para alcanzar el objetivo?
- ¿Qué rentabilidad debemos obtener de nuestro dinero?
- ¿Qué riesgo puedo asumir para alcanzar esta rentabilidad?
- ¿En qué momento necesitaremos disponer de nuestro dinero?
Alcanzar los sueños exige planificación y disciplina por lo que nuestro dinero debe tener un pie en tu presente y otro pie en tu futuro. ¿café?